lunes, 20 de mayo de 2013

LA MUERTE DE VIDELA

LA NOTICIA ME PARALIZÓ
Murió Videla. La noticia me paralizó. Inmediatamente empecé a pensar en mis hijos ¿Cómo podía pensar en otra cosa? La cabeza me daba vueltas, quería pensar en algo y nada. Pensaba en ellos y en las torturas a las que fueron sometidos. Veía sus caras gritando, pidiéndome, llamando a todos, como hicieron todos en los momentos más terribles, cuando estaban solos, en los momentos de mayor tortura.
Los medios me empezaron a llamar pero no tenía nada para decir. Sí sentí una gran angustia, un gran dolor que me atravesaba por todos lados. No podía pensar en otra cosa. No estaba contenta porque había muerto. No me podía poner contenta pensando en todo lo que nos había hecho. Pensé en todas las Madres, en tanto dolor, en todas las familias destruidas. Se me vino el mundo encima y cada vez que me llamaba alguien sentía más angustia, porque la mayoría de los que habían apoyado la dictadura, los diarios, sobre todo Clarín, ahora le dicen dictador, ahora le dicen genocida ¡qué vergüenza! Pero yo seguía pensando en ellos, nuestros hijos. Tanto que amaron a esta Patria, tanto que dieron por ella y yo tenía que escuchar a estos, que apoyaron la dictadura, hablar de genocida ¡cuánta hipocresía! Nuestro pueblo tiene que entender que toda esa hipocresía hizo posible que nuestros hijos fuesen señalados como terroristas cuando todos estos, que hoy se rasgan las vestiduras, miraron para otro lado. Algunos se llenaron de dinero y otro se llenaron de oprobio.
Quise hablar pero no me salía nada. Hoy decidí escribir algo para que todos los que esperaban mi voz se enteren que pensaba. Me quedé ahogada de dolor, de angustia, bronca y tristeza pero de repente me estalló el corazón y dije: ¡Qué suerte que tuvimos hijos tan valientes! Esa es la única felicidad que me surgió al final: la valentía de nuestros hijos de dar sus vidas para que otros vivan. 

Hebe de Bonafini
Presidenta Asociación
Madres de Plaza de Mayo
Que puede decirse después de estas palabras de Hebe, que se puede agregar, cuanto dolor hay en ellas, cuanta demencia hubo en esta época terrible que vivimos, cuanta complicidad de muerte , cuanto avasallamiento a los ideales, a los sueños, a las ansias, a la pertenencia.
Habrá otro ser en el mundo que pueda transmitir la desesperación que padece una madre que pierde por arrebato de los genocidas , lo más querido que es un hijo? Por eso me enojo cuando los llaman inhumanos, NO!!!, son humanos, tomaron la teta, nacieron de un vientre, crecieron jugando, si no les damos la dimensión de humanos vamos a sesgar lo que realmente fueron, asesinos, apropiadores, cretinos, infames seres que compartieron este país, nuestro País, con gente como vos o como yo y que mataron en nombre de Cristo, apoyados por civiles y clérigos que les daban la comunión, esos mismos que deberían haber sido excomulgados de la " Santa Madre " (?) Iglesia
Cuanta hipocresía y miseria pueden  albergar algunos seres humanos
Paz Y amor
Gra